Je suis désolée! (2)
Dice mi querido amigo Tacho que subirse al metro en Madrid es de pobres. Vacila con ello —de broma, claro—, como con tantas otras cosas que te pueden resultar chocantes, hasta que comprendes su gran humanidad y vocación de servicio.
Estando en París me acordé mucho de él al bajar al susodicho…
